A las 6:36 de la mañana del 31 de agosto de 1917, los habitantes de Bogotá se despertaron en medio de la comisión y algarabía que producía el terremoto más devastador que se ha registrado en la capital del país.

La ciudad, que se encaminaba a convertirse en la Atenas de Sudamérica y que celebraba el primer siglo de Independencia, era sacudida por un temblor de magnitud 6,7, que dejaba 22 personas fallecidas y otras 35 heridas.

Emblemáticas edificaciones como el santuario de Guadalupe y la Iglesia de Chapinero, cuya cúpula se desplomó y ocasionó varias de las muertes registradas ese día, sufrieron graves afectaciones, así como otras 300 construcciones a lo largo de la floreciente capital.

El sistema Geológico ha dicho que ninguno de los siete sismos importantes en los últimos 379 años que han tenido efectos significativos en la ciudad, han sido con epicentro en Bogotá.
Aunque la entidad no puede asegurar que vaya a existir un sismo como lo han dicho varias personas, por la supuesta maldición de un padre, si tienen claro que desde la ciencia se conoce que donde hubo un sismo o este tuvo efectos, es probable que vuelva a ocurrir.

¿Es posible que se vuelva a presentar un sismo devastador en Bogotá?

Por cuenta del reciente sismo de magnitud 6,1 que sacudió a Bogotá y varias localidades del centro de Colombia, los ciudadanos le preguntaron a los expertos del SGC si era posible que se volviera a presentar un sismo devastador en la capital.

Por esta razón, la entidad, que mantiene un monitoreo de los eventos sísmicos en el país, compartió una premisa básica de sismología: “Donde un sismo ha ocurrido o ha tenido efectos en superficie, es probable que esto vuelva a pasar”.

“En la capital podría haber afectaciones importantes tras la ocurrencia de un sismo, aunque el evento no tenga epicentro allí mismo”, indicó el SGC.