En su segundo día de agenda en China, el presidente Gustavo Petro sostuvo en la noche de este miércoles (hora local China) un encuentro clave con los representantes y directivos del consorcio encargado de la construcción del Metro de Bogotá.

El mandatario llegó acompañado de varios de sus ministros que hacen parte de la comitiva en al visita al gigante asiático, entre los que se encuentran está el ministro de las Tic, Mauricio Lizcano; ministro de Transporte, William Camargo; canciller Álvaro Leyva y el equipo jurídico de la Presidencia, en cabeza de Vladimir Fernández y el embajador en ese país, Sergio Cabrera.

Por parte de “China Harbour Engineering Company” (CHEC), consorcio que tiene a su cargo la construcción de la mega obra en la capital colombiana, asisten al encuentro Su Yansong, Vicepresidente de CHEC; Wu Yu, vicepresidente también del consorcio; Wang Rui, gerente comercial senior y Yu Huixian, gerente comercial de negocios.

Petro en China

Es de anotar que el presidente Gustavo Petro durante la visita de Estado a la República Popular de China, donde tuvo un encuentro con su homólogo, Xi Jinping, dijo que “sería una tontería” para Bogotá no tener metro subterráneo si la nación “quiere financiar el cien por ciento de ese proyecto”.

De acuerdo con la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, así como otros expertos, modificar la ejecución del mismo generaría retrasos a una obra que esperan los bogotanos y colombianos desde hace más de 30 años.

El jefe de Estado, en diálogo con periodistas, luego de las reuniones sostenidas con directivos de las empresas Xi’an Metro Company Limited y China Harbour Engineering Company Limited, que ejecutan la construcción de la primera línea del metro de Bogotá, se concluyó que “técnicamente la obra se puede desarrollar en la primera línea en dos fases: una elevada y otra subterránea”.

El mandatario resaltó que el proyecto se estructuraría utilizando los estudios adelantados durante su alcaldía y los que se han hecho en las siguientes administraciones. “No implicaría mayores demoras”, agregó.

Resaltó que para Bogotá sería increíble porque los recursos que se ahorraría se podrían invertir en escuelas, sedes universitarias, en hospitales, en desarrollo de otro tipo de vías, por lo que insistió en que es la nación la que quiere acoger una financiación 100% viable.

Además, que se pueden utilizar todos los estudios, hasta los que hizo su alcaldía, con lo cual se recuperaría el dinero que se invirtió.

Anotó que, si técnica y jurídicamente, es posible, conforme a lo examinado con los directivos de chinos, “ya veremos que dice el pueblo bogotano. Para Bogotá sería increíble, porque entonces, los recursos que dejaría de utilizar (en la financiación del metro) los podría usar en escuelas, en hospitales, en desarrollo de otro tipo de vías, etcétera”, agregó.

Por último, el mandatario aseguró que la oferta del Gobierno nacional a la administración de Bogotá permitiría “una primera línea profundamente poderosa para las necesidades de una ciudad del tamaño de Bogotá que no se puede contentar con cualquier tipo de obras, como lo ha hecho hasta ahora –por eso los problemas de movilidad– y que bien se merece un metro subterráneo”.