Un grupo de indígenas de las comunidades de Chocó, asentadas en Medellín, principalmente en el sector de Niquitao, decidieron salir este miércoles a protestar en La Alpujarra por lo que consideran un abandono y falta de apoyo institucional, sumado a algunas situaciones puntuales como atropellos en medio de operativos de la Policía en El Poblado.

Todo transcurría en relativa calma hasta que un grupo de personas decidió ingresar al centro administrativo donde causaron destrozos y rompieron vidrios.

La Secretaría de Seguridad de Medellín informó que desde el Puesto de Mando Unificado se está monitoreando y dando instrucciones para el control de la situación presentada en el Centro Administrativo Distrital.

El alcalde Daniel Quintero dijo que la protesta se realiza para que las autoridades los dejen “usar sus niños para pedir plata, trabajar, hacer bailes a extranjeros hasta altas horas de la noche. En Medellín esto no está y no estará permitido”.